“Vikings”: el obispo Heahmund de la vida real

A pesar de que la sexta temporada de “Vikings” (”Vikingos” en español) terminó en diciembre de 2020, los fanáticos del drama histórico siguen viendo cada uno de sus episodios en Amazon Prime Video y Netflix, además de haciéndose preguntas sobre la trama y sus personajes, entre estos, el obispo Heahmund.

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En la ficción de History Channel, Heahmund (Jonathan Rhys Meyers) fue obispo en Wessex, aunque al mismo tiempo se consideraba un pecador, debido a que no podía cumplir con el celibato. También fue un guerrero muy hábil, que defendió su nación hasta el final, cuando los vikingos invadieron el reino sajón.

Como bien indica Express, Heahmund fue una adaptación libre de una figura histórica real, un obispo medieval del mismo nombre que vivió en Wessex, en el siglo IX, y que sirvió a los reyes Aethelred y Alfred.

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Además, el verdadero Heahmund era el obispo de Sherborne, que hoy se conoce como el obispo de Salisbury, se consagró en 867 u 868 y sirvió a la Iglesia Católica.

Sin embargo, al igual que sucede con otros personajes de “Vikings”, su historia mezcla hechos históricos y ficticios, en este último encaja el romance de Heahmund con Lagertha (Katheryn Winnick).

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LA MUERTE DEL OBISPO HEAHMUND

De vuelta en Inglaterra, Heahmund enfrenta una vez más a los nórdicos, liderados esta vez por el rey Harald, y muere a manos de Gunnhild tras ser alcanzado por varias flechas en el campo de batalla.

Mientras que el verdadero Heahmund murió en la Batalla de Mereturn en marzo de 871, también conocida como la Batalla de Merton, fue enterrado en Keynsham en Somerset y fue consagrado como santo en la Iglesia Ortodoxa Oriental y la Iglesia Católica Romana.

En una entrevista con Variety, Michael Hirst, el creador de “Vikings”, habló sobre la muerte de Heahmund y aseguró que estaba completamente preparado para ese momento. “Fue a la batalla casi con ganas de morir, limpiado... y sin embargo... no sé si lo notaste, pero sus últimas palabras son que ama a Lagertha”.

Hirst también explicó cómo el obispo “se condena a sí mismo” al final, demostrando que su amor por la madre de Bjorn conquista todo lo demás.

“La escena de la muerte fue filmada en la nieve y el frío glacial en un campo bastante cerrado y, por supuesto, estas escenas deben ser muy intensas y bastante mecánicas para filmar ya que estamos tratando con flechas, pero tiene una fluidez en su manifestación de la circunstancias y consecuencias de su muerte y lo que significa para Lagertha”, agregó.