Los ridículos y baratos regalos que se hace la familia real británica por Navidad

La Navidad con la familia real británica incluyen una serie de actividades entre las que figuran una cena de etiqueta, una misa solemne y regalos bastante peculiares. Los royals suelen abrir los presentes a la hora del té en Nochebuena en la residencia de Isabel II del Reino Unido en Sandringham y a lo largo de los años ha trascendido que, lejos de entregarse ostentosas joyas y obsequios caros, se regalan unos a otros artículos ridículos y baratos en tono de humor. A continuación la singular tradición navideña de la realeza inglesa.

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La tradición tiene mucho sentido ya que los integrantes de la realeza británica pueden acceder a cualquier cosa que podrían querer, ¿Por qué elegir algo costoso que seguramente no le servirá a nadie cuando se puede conseguir algo barato que hará reír a todo el mundo en Nochebuena? A continuación los regalos más singulares que la familia real británica se ha dado a lo largo de los años.

Diana de Gales

Al parecer, nadie le contó a la princesa Diana de Gales de esta simpática tradición en su primera Navidad junto a la familia real británica, así que en su primera Nochebuena como royal se tomó un gasto enorme y se tomó la molestia de comprar varios jerseys de cachemira y bufandas de mohair.

La regla inflexible es que todos deben abrir sus regalos frente a todo el grupo y cuando vieron por primera vez los obsequios de la princesa Diana, todos, excepto ella, pensaron que era muy gracioso.

Isabel II del Reino Unido

En 2013, el príncipe Enrique de Sussex decidió poner a prueba el sentido del humor de su abuela, Isabel II del Reino Unido, obsequiándole un gorro de ducha en el que estaba estampada la leyenda: ‘Ain’t Life A Bitch’ (La vida es una mier...). Según el biógrafo real Brian Hoey, a la reina le encantó.

Al parecer, la reina también recibió un hámster cantarín por parte de Meghan de Sussex. La esposa del príncipe Enrique sorprendió a la monarca con este curioso regalo durante su primera Navidad con la realeza, según las informaciones publicadas en ese entonces.

Carlos de Gales

La princesa Ana del Reino Unido una vez le compró a Carlos de Gales un asiento de cuero para el inodoro. Según Hoey, al heredero de la Corona le gusta tanto que lo lleva consigo cuando viaja.

Catalina de Cambridge

La esposa del príncipe Guillermo compró una vez a su cuñado, Enrique de Sussex, un kit para hacer crecer a su propia novia. El regalo de broma fue antes de que el príncipe Enrique y Meghan de Sussex se casaran. La biógrafa real Katie Nicholl compartió ese detalle en el libro “Kate: La Reina del Futuro”.

Aunque no todos los regalos de la princesa Catalina han sido tan ridículos. Una vez, al parecer, fabricó señuelos de pesca para el príncipe Felipe de Edimburgo. La revista Grazia reveló también que Catalina compró un frasco de perfume Floris para Su Majestad y un sombrero de lana para su esposo.

Catalina también se le ocurrió regalar mermelada casera un año. De acuerdo a la revista Vanity Fair, regaló mermelada de fresa y conservas de ciruela como regalos de Navidad en el año 2011.

¿Quién es Isabel II del Reino Unido?

Lilibet, era el apodo que le dio el rey Jorge VI del Reino Unido a su primera hija, la reina Isabel II del Reino Unido. Preparada por los mejores tutores de Inglaterra en su época, Elizabeth destacaba por sus estudios en historia constitucional, leyes y literatura, formándose para el rol que asumiría a los 25 años, y que la convirtió en la actual figura principal del Reino Unido y otras 54 naciones ante el mundo.

La reina ha sido testigo de eventos que han marcado la historia. Durante la Segunda Guerra Mundial, Isabel II ingresó al Ejército británico como teniente, convirtiéndose en el primer miembro de la familia real en enrolarse a las fuerzas armadas a tiempo completo. La monarca ha visto pasar a 14 primeros ministros del Reino Unido, siendo servida por figuras como Winston Churchill y Margaret Thatcher.

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