La insólita historia de Ben Pool se volvió viral tras su publicación en redes sociales. (Foto: Captura)
La insólita historia de Ben Pool se volvió viral tras su publicación en redes sociales. (Foto: Captura)

Una peculiar historia ha llamado la atención de los usuarios YouTube y otras plataformas sociales. Seguramente conoces a alguien que depende de su taza de café por la mañana para terminar de despertar; sin embargo, esta terminó convirtiéndose en el salvavidas de un ciudadano estadounidense. Su historia se volvió .

Se trata de Ben Pool, quien vive junto a su perro en Fruitland Park, Florida, una localidad que es usualmente invadida por coyotes.

Según el portal Live Science, estos animales se han visto obligados a enfrentarse a la constante expansión de las ciudades, lo que los motiva a invadir ciertas regiones en búsqueda de comida. 

Según el sitio, los coyotes son omnívoros, lo que significa que su dieta alimenticia es bastante variada: desde las formas más pequeñas de vida silvestre como verduras y frutas, hasta roedores, serpientes e incluso desperdicios.

Lamentablemente, esto significa que un coyote realmente hambriento puede optar por mascotas domesticadas como gatos o perros, lo que se ha convertido en una preocupación para los residentes de Fruitland Park.

Esto fue justamente lo que le pasó a Pool, quien no pudo evitar sorprenderse al darse cuenta de que su perro estaba por iniciar una pelea con un coyote. 

Aunque en un inicio pudo separarlos, el hombre supo que el animal volvería a insistir pues lucía bastante hostil. 

Es así que, tras darse cuenta de que no tenía ningún arma cerca, excepto por la taza de café que sostenía en ese momento, decidió hacer lo impensado para proteger a su amigo canino.  

"Vino directamente a mis piernas. Primero lo golpeé a un lado de la cabeza con la taza", dijo el hombre a un canal de televisión local. 

"Volvió a atacarme, lo golpeé de nuevo y saltó hacia mi cara. Cuando lo hizo, salté hacia atrás y lo golpeé en la cabeza. Gritó y bajó", añadió.

Pool no perdió tiempo. Tomó a su mascota y se refugió en su hogar; no obstante, el ataque del coyote estaba lejos de culminar. 

"Fue extremadamente agresivo. No respondió al ruido que le hacía. Cuanto más hacía eso más se enojaba", aseguró. 

Finalmente, Pool se subió a su camioneta en un intento por alejar al animal. "Cuando lo hice, saltó hacia mi ventana", dijo, viéndose obligado a golpear al coyote con su vehículo. 

Dada la naturaleza agresiva del coyote, WESH informó que el hombre no enfrentará ninguna intervención legal a pesar de que el animal haya muerto en el enfrentamiento.

Se dio a conocer que tanto Pool como su perro se encuentran a salvo tras la amarga experiencia. 

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