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Todo lo que das, vuelve. La pizzería Nisa, en Tenerife (España), atravesaba una complicada situación económica y estaba casi al borde de la quiebra. No muchas personas ingresaban al local a comprar los alimentos y, para no arrojarlos a la basura, la dueña decidió hacer algo en favor de los necesitados, sin imaginar que eso y un mensaje en Twitter de su hija, la ayudarían a cambiar su historia.
Cada noche, la mujer dejaba en la puerta del local los trozos de pizza que nadie se animó a comprar. Su idea era que quienes viven en la calle y no cuentan con un hogar, puedan tomar uno y así calmar su hambre.
"No siempre podemos hacer grandes cosas, pero sí podemos hacer cosas pequeñas y con gran amor. Si lo necesitas, coge uno", se lee en las cajas.
Este mensaje se hizo viral en España luego que un usuario lo compartiera en redes indicando que: "Las personas que tienen gestos como estos les tiene que ir bien en la vida, ya sé a dónde iré a comer cuando visite la Laguna, mucho éxito", escribió en Twitter.
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Esto hizo que muchas personas se interesaran en el negocio, sumado a que la hija de la dueña también decidió hacer algo por su mamá y así evitar el cierre del local.
"Mi madre abrió una pizzería hace unos pocos meses en La Trinidad y verla así de vacía la entristece un montón. Ojalá con la magia de Twitter llegue a alguien que le guste probarlas", escribió el pasado viernes.
Sin embargo, también hubo mensajes negativos, pero ella supo expresar su verdadera intensión: "Me rompe el alma que la gente diga que es por pena o como marketing. La pena me da a MÍ por verla días enteros ahí metida sola. Ojalá la situación cambie, son gente maravillosa y espero que si van a probarlas les guste".
Sin duda esto sucedió y como magia pura empezó a llegar el apoyo e, incluso, la hija de la mujer aseguró que les están pidiendo muchas pizzas veganas, una opción incluida en su completa carta.