Cachorros fueron arrojados a un basurero para que mueran pero un indigente los salvó

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Una historia que ha dado la vuelta al mundo. Fueron abandonados a su suerte pero recibieron una nueva oportunidad de vida. Un indigente en Estados Unidos salvó a de morir en la basura a siete cachorros recién nacidos, que habían sido arrojados por una mujer que terminó tras las rejas acusada de crueldad animal.

De acuerdo a la televisora KCBS-TV, Deborah Sue Culwell (54) fue arrestada el pasado 22 de abril en su residencia de Coachella, en California, por haber arrojado a los indefensos animales en un basurero ubicado en la parte trasera de la tienda de autopartes NAPA.

Lo que esta mujer desconocía mientras bajaba de su auto y desechaba a los cachorros de tres días de nacidos en el contenedor era que su deleznable accionar estaba siendo registrado por una cámara de seguridad del establecimiento.

Sin embargo, la captura de Culwell solo es una parte de la historia ya que, sorprendetemente, los cachorros sobrevivieron su estancia en el basurero durante uno de los días más calurosos del año gracias a la oportuna intervención de una persona sin hogar pero de buen corazón.

Mientras revisaba el contenedor en busca de botellas plásticas para reciclarlas por dinero, el indigente encontró a los cachorros y los sacó de inmediato, dejándolos cerca de la entrada del local para que otros se hicieran cargo de ellos.

Si bien se desconoce si lo hizo por un espontáneo acto de bondad o para que no creyeran que había sido él quien los había arrojado a la basura, los rescatistas aseguran que su decisión fue crucial para que los cachorros puedan sobrevivir.

Jazzy Espino, trabajadora de la mencionada tienda de autopartes, contó que luego de que un cliente les avisara de la presencia de los cachorros, los colocaron en una caja y los llevaron adentro, ya que estaban muy calientes y sudando profusamente debido a las elevadas temperaturas.

“Llamamos al refugio y vinieron a los 10 minutos. Mi colega fue a la tienda de al lado para conseguir fórmula para alimentar a los cachorros mientras tanto”, añadió Espino, al tiempo que dijo que no de ser por el indigente, estos cachorros no se hubieran salvado.

“El contenedor está en la parte de atrás de la tienda, nadie va allí. De no haber sido por el indigente que escarbó en la basura unos minutos después (del abandono de los cachorros), jamás los hubieran encontrado”, finalizó.

Por su parte, Chris Mayer, comandante del Servicio Animal del Condado de Riverside, destacó el papel desempeñado por el buen samaritano en el rescate de los cachorros y condenó el accionar de la mujer, calificando lo que hizo como un “acto vergonzoso”.

Una organización de rescate local tomó posesión de los cachorros, así como de otros 38 perros encontrados en la residencia de Culwell, y los reubicó. Actualmente se encuentran en mejores manos y se espera que pronto sean adoptados por verdaderos amantes de los animales.