¿Te imaginas acabar preso por robar un bocadillo en una panadería? Pues esto fue lo que precisamente ocurrió en España donde un joven deberá pasar un año y nueve meses tras las rejas por este hecho, donde habría amenazado al personal a cargo con el trozo de una lata.
En su sentencia, el juzgado de lo penal número 28 de Barcelona condenó al procesado “por un delito de robo con intimidación a menos de dos años de cárcel, por lo que en principio no implicará su ingreso en prisión al carecer de antecedentes”, informó el diario ABC.
En el juicio la fiscalía solicitó tres años y medio de cárcel para el acusado, mientras que su defensa argumentó que este actuó movido por un “estado de necesidad”, ya que tenía hambre, y que el objeto cortante que esgrimió era solo la lengüeta de una bebida en lata. Varios medios de España informaron del caso y los videos de los reportes son tendencia en YouTube.
En su declaración, el joven admitió que se abalanzó sobre el mostrador de la panadería para robar un bocadillo porque “tenía hambre” luego de que un cliente al que pidió ayuda se negó a comprarle algo, pero insistió en que en ningún momento amenazó ni intimidó a nadie.
Las encargadas del establecimiento, por su parte, explicaron ante el juez que el procesado blandió ante ellas un objeto metálico “muy pequeño”, que no supieron identificar, y que tras hacerse con el alimento huyó a toda velocidad.
Para pedir la absolución de su cliente, su defensora legal se remitió a varias sentencias absolutorias de los llamados casos de “hurtos famélicos”, en los que se exime de responsabilidad a quienes cometieron un delito bajo una situación de “estado de necesidad”.