Carlota de limón

30/06/2020, 08:17 a.m.

La carlota de limón es un postre bastante pedido en los hogares, sobre todo en países como Estados Unidos y México, en donde se suele elaborar para ocasiones especiales. Capas de galletas cubiertas con una crema dulce de dos leches con jugo de limón. También conocida como pay frío de limón. La receta que te traemos es muy fácil de preparar. Anímate a hacerla.

MIRA: Cómo hacer churros caseros

Ingredientes

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2 latas de leche evaporada
2 latas de leche condensada
3/4 taza de jugo de limón recién exprimido
2 paquetes de galletas Marías o vainilla

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MIRA: Flan de café

Preparación

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Coloca la leche evaporada, leche condensada y jugo de limón en un tazón mediano. Bate con batidor de globo hasta tener una consistencia espesa y homogénea.
Acomoda una capa de galletas Marías en el fondo de un refractario de vidrio rectangular grande. Cubre las galletas con una capa de leche con limón. Repite el procedimiento de capas hasta terminar con una capa gruesa de leche.
Congela durante 6 horas o toda la noche. Saca del congelador justo al momento de servir.

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Ficha

Dificultad: fácil.

Tiempo: 8 horas 15 minutos.

Porciones: 16.

TRUCOS DE COCINA QUE TE AYUDARÁN A AHORRAR

Evita las verduras ya cortadas

Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.

Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos

Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.

¿Unas fresas mustias? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido. (PhotoMIX | Pexels)

Haz caldos

No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.

Busca productos de temporada

El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.

Cortes de carne más baratos

Ser carnívoro también es compatible con ahorrar. Es más cuestión de saber comprar que de saber cocinar y tener claro que no siempre los cortes más caros son los más exquisitos. ¿Has probado los contramuslos de pollo? Mucho más barato y sabrosos para, por ejemplo, acompañar con un cremoso puré de papas.