:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/JPFTZDPGRZBGPE6KUHYQHVLYGE.jpg)
En el Día de Acción de Gracias (Thanksgiving day) el pavo es el actor principal. La receta que te traemos ahora se trata de un pavo con un relleno que aunque parece trabajoso, es muy fácil de hacer. El pavo relleno requiere tiempo y que estés pendiente del horno. Una vez esté lista la carne de esta ave, lo puedes acompañar de un cremoso puré de papas, ensalada o salsa de arándanos.
CLIC AQUÍ: Todas las notas de Acción de Gracias en Mag
Ingredientes
- 1 pavo (de 4kg aproximadamente)
- 500 gr de carne magra de cerdo picada
- 200 gr de cebolla
- 200 gr de pasas
- 100 gr de miga de pan
- 1 vaso de leche
- 1 vaso de Jerez
- 1 vaso de vino blanco
- 1 vaso de caldo de ave
- Sal y pimienta negra al gusto
Preparación
- Limpia y retira las visceras del pavo. En un bowl, pon a macerar las pasas en el vino de Jerez durante una hora, y luego añade la miga de pan y la leche.
- Pela y pica la cebolla. En una sartén con un poco de aceite, fríe la cebolla.
- Mezcla la carne de cerdo, con la cebolla, la miga de pan y las pasas y forma una bola. Salpimenta al gusto.
- Rellena el pavo por la cavidad inferior.
- Precalienta el horno a 180 grados.
- Cose el pavo para que no se salga el relleno con un cordel fino.
- Unta el pavo con aceite de oliva y hornea durante dos horas y media a 180ºC. Riega el pavo cada 15 o 20 minutos con su jugo y un poco de vino blanco y caldo para que no se seque.
FICHA
Tiempo preparación: 20M
Tiempo total: 180M
Porciones: 8
TRUCOS DE COCINA QUE TE AYUDARÁN A AHORRAR
Evita las verduras ya cortadas
Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.
Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos
Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.
Haz caldos
No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.
Busca productos de temporada
El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.
Cortes de carne más baratos
Ser carnívoro también es compatible con ahorrar. Es más cuestión de saber comprar que de saber cocinar y tener claro que no siempre los cortes más caros son los más exquisitos. ¿Has probado los contramuslos de pollo? Mucho más barato y sabrosos para, por ejemplo, acompañar con un cremoso puré de papas.