El gesto inhumano del joven provocó el enojo de los demás clientes en el bar. (Imagen: Pexels)
El gesto inhumano del joven provocó el enojo de los demás clientes en el bar. (Imagen: Pexels)

Las relaciones entre los padres y sus hijos adultos no siempre son buenas. A veces, algunos consideran a sus progenitores ancianos como una carga pesada que llevar. Bueno, así sucedió en la ciudad de Rosario () cuando tras pagar la cuenta, un joven decidió abandonar a su madre en un establecimiento. La , ahora , desató indignación y encendió la polémica en .

Después de llegar al local llamado “Calabaza Bar”, ubicado en plena esquina de Sarmiento y San Lorenzo, ambos ocuparon una mesa a las 11 de la mañana. El hombre pagó el almuerzo, pero decidió retirarse y la dejó en el lugar.

Con el transcurso de las horas, el personal comenzó a preocuparse por la señora de 68 años que estaba en silla de ruedas. Cerca de las 6 de la tarde, los trabajadores le advirtieron a Enrique, el dueño del recinto, que nuestra protagonista podría necesitar ayuda.

“Ya hice demasiado por ella”

La mujer, cuya identidad no trascendió, le nombró un centro geriátrico. Sin pensarlo dos veces, el encargado llamó y una enfermera, que casualmente es clienta del bar, se prestó a apoyar y acudió al establecimiento para intentar obtener información clara.

Los empleados del bar se sorprendieron por la repentina acción del hijo. (Imagen: Pixabay)
Los empleados del bar se sorprendieron por la repentina acción del hijo. (Imagen: Pixabay)

Mientras tanto, Enrique consiguió el número de teléfono del hijo de la anciana y se contactó con él en dos oportunidades. Sin embargo, el muchacho se desentendió de la dramática situación.

“Llamé al hijo y me dijo que con 35 años ya había hecho demasiado por su madre, que la sacara y la dejara en la puerta del bar porque él no iba a hacer más nada por ella”, contó el propietario del local.

En diálogo con , Enrique también mencionó que “las dos veces que hablé me dijo que la dejara en la calle, y le contesté que lo hiciera él, porque yo soy incapaz de abandonar a una señora en la calle y dejarla a la buena de Dios”.

Recibe apoyo médico

Ante la inhumana reacción, varios clientes se acercaron a la barra y llamaron a distintas instituciones públicas. Afortunadamente, funcionarios municipales empezaron a colaborar y ella pudo ingresar a un policlínico.

Las autoridades volvieron a contactarse con el hijo y el hombre expresó dificultades para hacerse cargo de su mamá debido a la situación de salud mental que presenta la mujer, informó .


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