Viajar es una experiencia que muchos anhelan, llena de promesas de aventuras y descubrimientos. Sin embargo, a veces, las circunstancias pueden convertir un viaje de ensueño en una verdadera pesadilla. Esta es la historia de Vienna Skye, una modelo de Nueva York, y su madre, quienes quedaron varadas en un aeropuerto de Brasil durante casi una semana debido a repetidas cancelaciones de vuelos. Su historia es viral en Instagram.
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Todo comenzó con un viaje exótico a Brasil. Vienna Skye y su madre disfrutaron de unas vacaciones inolvidables hasta que llegó el momento de regresar a Nueva York. Con boletos en mano para un vuelo de domingo por la tarde, no imaginaron que su regreso se convertiría en una odisea de casi una semana.
El primer día de cancelaciones fue solo el comienzo. Después de llegar al aeropuerto y esperar horas para su vuelo, se encontraron con la primera de muchas decepciones. “United Airlines canceló nuestro vuelo sin previo aviso”, comentó Vienna en sus redes sociales, compartiendo su frustración con sus seguidores.
El segundo día fue una mezcla de esperanza y desesperación. “Pensé que sería solo una noche más”, dijo Vienna, quien se mantuvo optimista a pesar de las circunstancias. Sin embargo, otro día pasó sin solución a la vista.
Para el tercer día, la situación se tornó más complicada. Vienna y su madre se encontraron durmiendo en incómodos asientos del aeropuerto, sin un lugar adecuado para descansar. “No pude dormir porque United Airlines canceló mi vuelo cuatro días seguidos”, relató Vienna en un video que se volvió viral en Instagram, acumulando más de 3.6 millones de vistas.
El cuarto día trajo consigo más cancelaciones y una creciente frustración. Vienna recordó un momento esperanzador cuando abordaron un avión solo para ser informadas, una hora después, que el vuelo no despegaría. “Nos dijeron que buscáramos vuelos en otra aerolínea”, lamentó.
El costoso intento de regreso
Desesperadas por regresar a casa, Vienna y su madre gastaron US$4,000 en boletos de Delta Airlines, esperando que esta vez su vuelo no fuera cancelado. Sin embargo, esto significó otra noche sin descanso en el aeropuerto, sumando más estrés y agotamiento a su ya ardua experiencia.
A lo largo de esta odisea, Vienna también tuvo que pasar por la aduana de Brasil seis veces, un proceso que normalmente se hace solo dos veces en un viaje de ida y vuelta. “Fue agotador tener que lidiar con la aduana y cargar nuestro equipaje cada vez”, comentó.
La respuesta de la aerolínea
Después de toda la experiencia, United Airlines ofreció una disculpa y un reembolso por el vuelo no utilizado. “Nos disculpamos con el cliente por su frustrante experiencia de viaje y proporcionamos un reembolso”, dijo un representante de la aerolínea. Además, ofrecieron certificados de viaje como un gesto de buena voluntad, esperando que Vienna y su madre volvieran a volar con ellos en el futuro.
A pesar de estas medidas, Vienna expresó su descontento, ya que no se le compensó por los nuevos boletos comprados. “Siempre vuelo con United, pero después de esto, tengo miedo de volver a hacerlo”, confesó.
El caso de Vienna no fue aislado. En el mismo período, una crisis de seguridad cibernética a nivel mundial provocó la cancelación de vuelos en todo Estados Unidos. Un fallo en una actualización de software de Microsoft Windows paralizó aeropuertos, afectando a miles de viajeros. Delta Airlines, por ejemplo, canceló más de 800 vuelos debido a este problema.
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Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.
