Los pasos que no deberías olvidar al lavar los platos

Si sueles comer en casa, es posible que encuentres tu lavavajillas llena da cada ciertas horas. Debes saber que el lavado de tus platos, cubiertos y hasta vasos es de suprema importancia y así evitarás que las bacterias no proliferen. Hemos pensado en ti y te dejamos unas recomendaciones que no deberías dejar pasar.

Cometemos diversos errores que no solo se limitan a la esponja llena de gérmenes en nuestro fregadero, sino también al uso incorrecto del tipo de jabón o al hecho de no lavarse las manos previamente.

En ese sentido, en las siguientes líneas enumeramos la lista de cosas que debes evitar al momento de lavar los platos que, hasta la fecha, desconocías o simplemente no le dabas mucha importancia.

Errores al lavar los platos

Uno de los errores más comunes y que se pasa por alto es al momento de lavar la tabla de picar. Se recomienda enjuagarlas primero. Posteriormente, escurrir para que el agua corra y luego desinfectarlas con una solución de cloro durante dos minutos o empleando un producto.

Otro error es lavar en un fregadero sucio. Aunque no lo creas, este espacio de cocina podría tener más gérmenes que el inodoro. ¿Qué hacer al respecto? Una solución de vinagre blanco y bicarbonato de soda o con vinagre y sal.

Ahora bien, sobre los vasos y cuchillos hay que dedicarle un poco más de tiempo en su limpieza, ya que puede quedar rastro de comida y bacterias de la leche. Se debe enjuagar bien para evitar que crezcan bacterias en su interior.

Por último, se recomienda utilizar una esponja con fibras naturales que, luego de usarla, colgarlas para que se sequen completamente. ¿Cada qué tiempo se aconseja renovarlas? Semanalmente.

¿Cuál es el mejor material para lavar los platos?

Se recomienda usar un cepillo de plástico o silicona para refregar correctamente la vajilla de tu cocina. Estos se secan rápidamente y no dejan crecer bacterias en su composición, como si hacen las esponjas de cocina comunes.

Debes saber que las bacterias de restos de comida buscan las superficies de las esponjas de cocina para vivir. Aunque puedes calentarlas en el microondas para matar a la mayoría de estos agentes patógenos, lo mejor es cambiarlas con frecuencia.