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“Blanquear” es un término que se utiliza a menudo en la cocina, aunque las personas que se están iniciando en el mundo de la repostería desconocen muchas veces su significado. En esta nota encontrarás para qué sirve este proceso y cómo realizarlo de manera correcta.
En el mundo de la gastronomía es habitual relacionarse con diferentes términos y uno de ellos es “blanquear”. Seguramente habrás leído o escuchado en alguna receta esta palabra y no supiste qué hacer.
En la cocina y, principalmente en la repostería, es muy común utilizar el huevo para hacer merengues, tortas y otras exquisiteces. Las yemas, por ejemplo, le aportan a los productos de pastelería un sabor especial y lo hacen más suaves. Cuando este producto se bate con azúcar se está realizando el proceso de “blanqueado”.
El significado de “blanquear” en repostería
El término “blanquear” se utiliza en procesos de cocción y también en repostería. De acuerdo con Kitchen Academy, se refiere a batir hasta que la mezcla quede prácticamente blanca. Un ejemplo claro es cuando se bate los huevos o las yemas con azúcar.
Este proceso de pastelería permite que el volumen aumente y la mezcla de huevo con azúcar se convierta en cremosa.
¿Cómo blanquear en repostería?
El proceso de “blanqueado”, según explica la creadora de contenido Maestra Jacobina (@alacocinaconjacobina) , se utiliza para “esponjar” los pasteles y acelerar el proceso de preparación. No solo puedes añadir la yema, sino el huevo entero. A continuación, los pasos a seguir:
- En un recipiente coloca un puñado de azúcar blanca y luego agrega dos yemas de huevo
- Bate a mano o con una batidora y notarás que al principio la mezcla adquiere un color amarillo
- Sigue batiendo hasta que la mezcla se convierta blanquecina y, de esta manera, podrás incorporarla en tus pasteles
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