¿Por qué limpiar el asador o barbacoa con una cebolla?

Una barbacoa de fin de semana siempre es un buen plan para reunir a la familia y comer muy bien; sin embargo, luego de disfrutar de la carne asada, hamburguesas, chorizos o verduras llega el dilema de cómo limpiar el asador para que quede impecable y es aquí donde un truco de cocina es la solución: frotar una cebolla.

Este alimento contiene propiedades antibacteriales y, de acuerdo al portal Cocina Delirante, es la gran solución para limpiar el asador.

¿Cómo usar la cebolla?

Después de haber preparado la barbacoa (verifica que la parrilla no esté demasiado caliente) o antes de empezar a hacerla, solo deberás tomar la mitad de una cebolla y frotarla sobre la rejilla lo más fuerte que puedas para eliminar toda la suciedad. También puedes usar algunas gotas de limón o vinagre.

Para esto puedes ayudarte de las pinzas o tenazas con las que diste vuelta a las carnes y así evitar quemarte.

Una vez que todo esté limpio, no botes la cebolla y ponga en el carbón para darle más sabor a la carne y que salga más jugosa.

Otros trucos de limpieza

Si prefieres no usar la cebolla, puedes recurrir a otros métodos como emplear un cepillo para quitar los restos de comida que se hayan adherido a la rejilla o limpiar la grasa usando un estropajo de acero con agua y jabón neutro.

También puedes usar medio limón para frotar la parrilla y hacer que sus propiedades desengrasantes quiten toda la suciedad adherida.

TRUCOS PARA LA BARBACOA PERFECTA

1. Carne a temperatura ambiente

La carne debe salir de la nevera al menos una hora antes de asarla. Es recomendable probar diferentes cortes además de las tradicionales chuletas Y hamburguesas. El cerdo ibérico, la entraña argentina o el asado de tira son buenas opciones.

2. Marinado perfecto

Hacerlo no solo aporta más sabor, sino que el sumergirla en este preparado hará que se acelere el tiempo de cocción en la parrilla. Hay que empezar poniendo la carne en un recipiente y añadirle sal gruesa por encima. Machacar ajos en un mortero y agregar aceite de oliva, sal y pimienta negra. Untar con la preparación y guardar tapado al menos 2 horas o, mejor aún, la noche anterior a la barbacoa.

Si quieres aromatizar la carne puedes meter alguna hierba aromática como romero o tomillo en los laterales de la barbacoa.

3. Asa el pescado sobre rodajas de cítricos

De esta manera evitarás que se pegue a la rejilla caliente y le aportará más sabor. Rebanadas de limones, naranjas o limas son una gran opción

4. Usa papel aluminio

Forrar verduras con este material ayuda a sellar la humedad para obtener resultados tiernos y sabrosos. Todo se cocinará al vapor dentro del paquete y es ideal para papas, champiñones o maíz.

5. Emplea pinzas

No solo te permiten maniobrar fácilmente los alimentos sin quemarte, sino que también son útiles para levantar las rejillas calientes y mover las brasas para crear un mejor fuego.

6. Pan más crujiente

Si estás preparando hamburguesas y quieres que queden aún más deliciosas, debes extender una generosa capa de mantequilla sobre el pan y colocarlo en la parrilla para que se dore y quede más crujiente.

7. Acompañamientos y bebidas

Las carnes siempre quedarán muy bien al lado de guarniciones, ensaladas y salsas. Aquí destaca el chimichurri, la puttanesca y los tradicionales mayonesa o ketchup. En cuanto a las bebidas, los zumos o limonadas van bien con la barbacoa o un buen vino para brindar.

¿Cómo ahorrar dinero al cocinar?

Muchas veces ahorrar es mucho más fácil de lo que creemos. La clave es comprar bien y barato, planificar lo que se hará en la cocina y no desechar nada. Recurrir a alimentos económicos y sanos como las verduras y preparar en cantidad, siempre pensando en nuestro presupuesto de guerra.

Al final casi todo se resume en cocinar más y comprar menos productos elaborados. Pero para quienes prefieran una guía un poco más minuciosa, hemos preparado algunos consejos bien sencillos de empezar a aplicar ya mismo. Apunta estos trucos y aplícalos la próxima vez que vayas al mercado.

Evita las verduras ya cortadas

Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.

Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos

Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.

Haz caldos

No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.

Busca productos de temporada

El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.

Cortes de carne más baratos

Ser carnívoro también es compatible con ahorrar. Es más cuestión de saber comprar que de saber cocinar y tener claro que no siempre los cortes más caros son los más exquisitos. ¿Has probado los contramuslos de pollo? Mucho más barato y sabrosos para, por ejemplo, acompañar con un cremoso puré de papas.

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