Una madre aplicándole unas gotas a su hija en la nariz. | Imagen referencial: Gustavo Fring / Pexels
Una madre aplicándole unas gotas a su hija en la nariz. | Imagen referencial: Gustavo Fring / Pexels
Redacción Mag

Aunque estén extremadamente abrigados, coman frutas y vegetales ricos en proteínas y minerales, los mocos son los compañeros eternos de los bebés y niños pequeños, puesto que su sistema inmune está fabricando defensas continuamente. Por lo general, se realiza un lavado nasal para despejar sus fosas, pero muchas veces cometemos que no nos damos cuenta. En la siguiente nota te decimos qué cosas evitar a la hora de la nariz.

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De acuerdo al portal , se estima que un niño pequeño entre 12 a 15 infecciones respiratorias leves durante el primer año que va a la escuela. Haciendo cálculos, se podría decir que cogen un resfriado una cada dos semanas.

Otro aspecto a tomar en cuenta es el cambio brusco del clima, que termina siendo más determinante. En Mag te decimos algunos de los errores más comunes que se comenten en un lavado nasal.

Qué cosas debes evitar al realizar una limpieza de nariz

Gotas de suero

Muchas personas piensan que aplicando varias gotas de suero en la nariz es la mejor solución, sin embargo, es un grave error. Lo ideal es ejecutar un buen chorro de suero o haciendo varias inhalaciones de suero pulverizado.

Hacer limpieza cuando no hay

Otro error común, sobre todo en los padres primerizos, es realizar lavados cuando no hay congestión nasal. Lo recomendable es hacerlo cuando tienen gran incomodidad, preferiblemente, antes de la toma.

Coagulación

Hacer lavados nasales a niños con problemas de coagulación es otro error muy común. Esto solo facilitará que sangre por la nariz y es por ello que es mejor evitar estos tipos de lavados, según el portal .

Lavados nasales a un lactante

Para muchos, les resulta más factible hacer un lavado nasal cuando el bebé está sentado, pero lo ideal es cuando esté recostado sobre la cama o superficie cómoda, debido a que será más fácil la sujeción de la cabeza. De esa forma evitarás dañar sus fosas nasales.

Incomodidad

No a todos los niños les gusta que le realicen lavados de nariz, por ello si ves que le resulta incómodo es mejor detener. Puede ser que esté irritado sus fosas o no lo estés aplicando de la forma correcta.


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