Posibles causas de los calambres nocturnos en las piernas

Uno de los mayores placeres de la vida es llegar del trabajo o universidad y echarte a la cama para olvidarte del mundo. La única manera de que algo pueda interrumpir tu sueño es a raíz de un movimiento telúrico, pesadilla o que te dé un calambre muscular en la madrugada.

De seguro pensarás que tienes mala suerte porque justo el día que querías dormir de corrido, pero déjanos decirte que es bastante común. De acuerdo a un informe publicado en American Family Physician, hasta el 60% de los adultos y el 7% de los niños experimentan calambres nocturnos en las piernas.

Intentas calmar el dolor y acto seguido empiezas a lanzar posibles teorías del por qué te da calambres. Seguro lo primero que se te venga a la mente es la falta de actividad y estás en lo correcto.

Sin embargo, hay más causas detrás de estos espasmos incontrolados que, si bien son inofensivos, pueden imposibilitar temporalmente el uso del músculo afectado.

En ese contexto, en las siguientes líneas te decimos por qué suelen manifestarse en la pantorrilla, muslos y pies.

Posibles causas de los calambres

Una de las causas está relacionada a las malas posiciones durante el día. ¿Qué significa esto? Pasar mucho tiempo sentado o en una mala posición. Asimismo, trabajar o pasar mucho tiempo de pie sobre suelos de hormigón.

Otra posible causa puede deberse a una deshidratación y no precisamente porque no bebemos mucha agua durante el día, sino también sudoración excesiva sin reponer la sal, diarrea, toma de pastillas para orinar o ejercicio intenso.

También puede estar relacionado a enfermedades metabólicas como diabetes, alcoholismo, hipotiroidismo, hipocalcemia o hipomagnesemia.

En el caso de que estés embarazada también estás expuesta a sufrir de calambres nocturnos por los cambios hormonales en tu cuerpo, principalmente la falta de magnesio, según el portal Mayo Clinic.

Ahora ya sabes que no solamente te puede ocurrir por la falta de actividad durante el día, sino por otros factores internos. Si el problema es recurrente se recomienda acudir al médico de confianza.

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